No se puede disimular. Y tampoco el presidente Lula Inácio Da Silva quiso hacerlo. ¿Qué está sucediendo en Brasil? Un intercambio entre productores locales y chinos, especialmente BYD, alteró el panorama entre los meses de julio y agosto, y el presidente del país, a través de la ceremonia de apertura de la planta de Great Wall Motors en San Pablo, habló del tema y lanzó una frase contundente.
La frase de Lula que descolocó a varios en la industria automotriz
“Las que quieran irse que se vayan, las que quieran venir las recibimos con los brazos abiertos” sentenció el presidente brasilero. ¿Por qué lo dijo y en qué contexto? En el mes de julio del 2025, Volkswagen, Toyota, Stellantis y General Motors acusaron a BYD ante el pedido que hizo para una reducción de impuestos de importación. Las exigencias del fabricante chino fueron rechazadas, pero las automotrices locales no estuvieron de acuerdo.
Incluso, los fabricantes locales enviaron un comunicado en conjunto puntualizando que los pedidos de BYD “podrían poner en peligro a la industria local”. El comunicado enfatizó en la idea de proteger a los empleados locales y los recursos. Desde la empresa china mantuvieron cautela y se posicionaron como un actor intrascendente.
¿Y por qué el presidente de Brasil está en el medio? El comunicado fue enviado hacia el. Las automotrices intentaron prevenir el riesgo y lo hicieron mediante un contacto directo con Lula. ¿Cómo siguió el asunto? Great Wall Motors, otro fabricante asiático, abrió su fábrica en Sao Paulo, y durante la ceremonia estuvo presente el Jefe de Estado, que habló ante la prensa acerca de la situación de la industria automotriz.
Las frases más destacadas de Lula en la presentación de GWM
Sin dudas, la frase más llamativa fue “las que quieran irse que se vayan, las que quieran venir las recibimos con los brazos abiertos”. ¿Una advertencia para las automotrices locales? ¿Un lazo más cercano con los fabricantes chinos? Varias ideas pueden desglosarse acerca de esta frase, pero ante los micrófonos, el presidente comentó su relación con los fabricantes asiáticos.
¿Qué dijo sobre China? “Yo tengo una relación muy especial con el país” dijo Lula, y luego agregó que son su principal socio comercial. Luego habló acerca del “multilateralismo” porque desea que los países puedan negociar y dialogar en igualdad de condiciones. En cuanto a la tasa de empleo, el tema sensible para los productores que se expresaron acerca los movimientos de BYD, Lula deslizó que “los operarios que hacen los vehículos” tienen la “chance de comprar ese auto”.
El apoyo de Lula hacia los productores chinos siguió. Durante la celebración de la apertura de la planta de GWM en Sao Paulo, el presidente dejó en claro que su país está a disposición de otros países “para desarrollar y encontrar una plataforma para fabricar y vender productos”.
Con estas frases y miradas de la máxima autoridad del gobierno, está claro que Brasil sigue una línea de multilateralismo y con una relación cercana con el país asiático, un revés para los productores locales. Y como si fuese poco relevante, una consultora calificó de “excelente” el lugar escogido por GWM para trabajar en Brasil.
El premio que recibió GWM por el clima de trabajo en el país
Si bien la planta se inauguró hace unos días bajo la ceremonia, desde el 2021 GWM invirtió en la región de Sao Paulo para abrir su primera planta, que cuenta con más de 120 hectáreas y una superficie muy grande. Es por ello que la consultora “Great Place to Work” entregó un certificado global que reconoce la buena cultura organizacional que implementan algunas empresas. ¿Cómo lo calificaron? A través de una encuesta donde los empleados indicaron el nivel de satisfacción, con un 92% que reflejó el orgullo por los productos fabricados, y un 91% acerca del trabajo hecho en la empresa.
Números que avalan la buena predisposición de la empresa y el compromiso hacia la excelencia. “Estamos muy orgullosos” señalaron desde la compañía. La fábrica construida por GWM es la primera en América, por lo tanto mantiene varias miradas alrededor.
Dentro de los parámetros, la cultura organizacional que fomenta GWM en Brasil se basa en varios pilares: la inclusión, la confiabilidad, el respeto, la innovación, la colaboración, y sobre todo, la calidad humana. Bajo estos conceptos, la nueva planta en América Latina pretende seguir por esta línea.
Con toda esta celebración armada, sumado al certificado recibido, GWM está en la escena de la industria automotriz de Brasil y cuenta con el respaldo de Lula, el presidente de Brasil que también fue protagonista en los últimos días. Por sus dichos y declaraciones contundentes, el Jefe de Estado afirmó una “gran relación con China”, un revés para los productores locales y una puerta de entrada para los fabricantes de Asia y del mundo.